- 3 hojas de kale.
- 1 cebolla.
- 2 cucharadas de aceite de oliva.
- 100 gr de harina.
- 500 ml de leche.
- 100 gr de pan rallado.
- 1 huevo.
- Una pizca de nuez moscada en polco.
- Sal y pimienta al gusto.
Elaboración:
- Pelamos y picamos la cebolla. La sofreímos en una sartén hasta que comience a dorarse.
- Mientras quitamos el tallo central de las hojas de kale y lo picamos pequeño, cuando la cebolla comience a dorarse, añadimos el kale y seguimos cocinando hasta que este pierda la mitad de su volumen.
- Añadimos a la sartén dos cucharadas de harina, removemos bien y cuando comience a tomar un color tostado, añadimos la mitad de la leche y removemos hasta que comience a espesar.
- Incorporamos entonces el resto de la leche y seguimos removiendo hasta que esté bastante espeso y veamos que empieza a separarse de la sartén. Añadimos la nuez moscada, salpimentamos al gusto y pasamos a un recipiente de cristal, tapamos con papel film y dejamos enfriar en la nevera unas 3 horas.
- Vamos tomando pequeñas porciones de masa, las pasamos por harina, luego por huevo batido y por último por pan rallado.
- Las freímos en abundante aceite muy caliente hasta que comiencen a dorarse.
- Servimos.